Nace con el objetivo de desafiar las ideas preconcebidas y crear una arquitectura comprometida con su entorno. Buscamos realizar obras que perduren, respondan al contexto y mejoren el entorno construido. Nuestra intención es desarrollar ideas en lugar de proyectos, promoviendo formas de habitar y trabajar que trasciendan lo convencional. Consideramos que la esencia de un proyecto radica en la intención detrás de él, creando espacios con alma y atmósferas que generen una aura única.
BOLERO es un proyecto habitacional que refleja el profundo compromiso de los arquitectos no solo con el bienestar de sus inquilinos, sino también con la calidad de vida de toda la comunidad circundante y la ciudad en general. El proyecto fue diseñado para generar un impacto positivo, tanto en su entorno inmediato como en toda la ciudad, destacándose como un punto focal en la zona. Situado en la Calle José Brea Peña, a solo 500 metros de la Avenida Winston Churchill, el edificio goza de una ubicación privilegiada, que favorece la comunicación fluida con el resto de la ciudad, facilitando el acceso a una amplia gama de servicios públicos y privados en un radio de 700 metros.
Desde el inicio, BOLERO fue concebido con una idea clara: ser un desarrollo inmobiliario que no solo aportará a quienes viven en él, sino que también contribuyera al tejido urbano y social de la ciudad. Se buscó diseñar un edificio que se inserte en su contexto de manera armoniosa, generando valor al entorno y promoviendo la interacción entre los residentes y los ciudadanos. Además, los arquitectos querían que los espacios interiores despertaran emociones, que invitaran a disfrutar y, desde la distancia, despertaran curiosidad. De este modo, BOLERO aspira a convertirse en un referente arquitectónico dentro de su contexto local, sirviendo de inspiración para futuras edificaciones en la zona, que aún se encuentra en desarrollo.
Uno de los aspectos más notables de BOLERO es su fachada de colores vibrantes, que no solo aporta un elemento estético único al romper la monotonía del paisaje urbano, sino que también tiene un propósito funcional. La fachada fue diseñada como una “doble piel”, compuesta por paneles fenólicos dispuestos como una fachada ventilada, que protege el cerramiento de bloques de hormigón del sol directo. Este enfoque no solo mejora la eficiencia energética del edificio al evitar el sobrecalentamiento, sino que también mantiene una temperatura constante en el interior, reduciendo la necesidad de sistemas de climatización y evitando la formación de humedad por los cambios bruscos de temperatura.
El diseño de BOLERO se caracteriza por su atención al detalle en todos los aspectos. La volumetría del edificio se fragmenta en dos cuerpos conectados por una terraza compartida, que permite la entrada de ventilación e iluminación natural, creando un ambiente interior agradable. Además, los perfiles de aluminio segmentados cada dos niveles aligeran visualmente la estructura, haciéndola parecer más esbelta y moderna. Estos detalles no solo buscan una solución arquitectónica funcional, sino que también responden a una búsqueda estética contemporánea.
Los 29 apartamentos dúplex de BOLERO están distribuidos en dos niveles, separando las áreas comunes de las privadas, con el fin de crear una sensación de vivienda individual. En el nivel inferior se encuentran las áreas sociales, mientras que el nivel superior alberga las áreas privadas, garantizando así una mayor privacidad para los residentes. Además, los espacios se organizan alrededor de un vestíbulo amplio de doble altura, que sirve como un lugar de descompresión, un espacio donde el arte está presente y donde los residentes pueden dejar atrás el caos de la ciudad antes de ingresar a sus hogares.
El exterior del edificio también ha sido cuidadosamente pensado para integrarse con el entorno urbano. Las aceras anchas y arboladas, diseñadas para invitar a los transeúntes a pasear por ellas, junto con el espacio semi-privado ajardinado frente al edificio, brindan un respiro verde a la ciudad y fomentan la interacción entre residentes y visitantes. La inclusión de una única entrada vehicular también contribuye a la seguridad de los peatones y permite una mayor cantidad de estacionamientos en paralelo frente al edificio, lo que beneficia no solo a los residentes, sino también al vecindario completo.
Desde el vestíbulo de entrada, los residentes y visitantes acceden a las áreas comunes del edificio, que incluyen un área multiuso, gimnasio, área social y baños. Estos espacios han sido diseñados para promover la interacción social, fomentando encuentros entre vecinos y creando un sentido de comunidad. Además, todas las áreas comunes cuentan con vistas hacia las áreas verdes que rodean el edificio y reciben ventilación e iluminación natural, mejorando la calidad ambiental del espacio.
BOLERO, con su arquitectura contemporánea y su enfoque en la eficiencia energética, se erige como un proyecto que no solo ofrece comodidad y bienestar a sus inquilinos, sino que también promueve una transformación urbana más amplia. El diseño elimina las barreras entre el interior y el exterior, favoreciendo la accesibilidad universal y creando espacios que promueven el sentido de pertenencia. Las áreas comunes invitan al esparcimiento, y las vistas verdes ofrecen un respiro del bullicio urbano, contribuyendo así a mejorar la calidad de vida de todos los que interactúan con el edificio.
Hoy, BOLERO es una realidad construida, palpable, que refleja el esfuerzo de un equipo de trabajo comprometido, lleno de ilusiones y convicciones. Este proyecto demuestra que es posible materializar lo que un día fue solo una idea, un sueño que va más allá de un simple desarrollo inmobiliario, para convertirse en un verdadero aporte a la ciudad y a sus habitantes. BOLERO es, en última instancia, un símbolo de cómo la arquitectura puede transformar no solo los espacios, sino también la vida de las personas que habitan en ellos y las ciudades que los acogen.